COP28: El rol de las empresas en las Energías Renovables
Hace unas semanas, concluyó la COP28 marcando hitos cruciales para el avance hacia un futuro sostenible. Entre los acuerdos, resalta la iniciativa de 117 países, incluyendo Chile, que se comprometieron a triplicar las energías renovables para 2030 y duplicar la eficiencia energética.
En esta línea, las metas estatales de reducción del 30% de las emisiones al 2030 y la carbono neutralidad al 2050 son medidas que se alinean con las metas COP; así como la Ley 21.305 que exige a las empresas, específicamente a aquellas que consumen de 50 a 100 tera-calorías anuales, contar con un Sistema de Gestión de Energía, impulsándoles a incorporar esfuerzos de eficiencia energética en su gestión.
A pesar de que más del 40% de la capacidad eléctrica en Chile proviene de fuentes renovables, el desafío planteado en la COP28 requiere una colaboración sin precedentes entre el gobierno, la sociedad y las empresas.
El aporte de la empresa inicia con la cultura de sostenibilidad.
El rol de las empresas en este objetivo asumido en la COP28 es fundamental. Más allá de la investigación, el desarrollo o la implementación de tecnologías, abordarlo desde la cultura empresarial juega un papel crucial.
Cuando las compañías adoptan una cultura de sostenibilidad, los valores se internalizan en cada colaborador, estimulando prácticas que van desde la eficiencia energética en el día a día hasta la ejecución de proyectos con consideraciones renovables en todas las áreas. Eso puede lograrse, por ejemplo, promoviendo la contratación de proveedores que trabajen con energías renovables, o considerando recambios de maquinarias por unas que sean más eficientes energéticamente.
En Chile, ya vemos ejemplos claros de este compromiso. Empresas del sector minero y de energía hacen cada vez más esfuerzos por mejorar sus procesos y reducir su huella. Mientras tanto otros sectores se han enfocado en promover la movilidad sostenible, como es el caso de la reciente alianza entre Seguros SURA y Copec Voltex.
Estos ejemplos subrayan la creciente comprensión del sector privado sobre la importancia y beneficios de la sostenibilidad. Sin embargo, es importante que se entienda que incorporarla en la cultura organizacional es una labor permanente, que debe integrarse en el día a día de cada colaborador/a con prácticas concretas.
Gobernanza: Aspecto clave del ASG
Como hemos visto, es crucial que las empresas no sólo enfoquen sus esfuerzos en proyectos disruptivos, sino que también inviertan en cambios de transformación cultural sostenible.
Esto implica no sólo una estrategia gerencial sólida, sino también la implementación de modelos de gobernanza efectivos que promuevan la responsabilidad y el compromiso con la sostenibilidad, no solo en temas de energía, sino también en diversas iniciativas enmarcadas en los 3 aspectos del ASG, y que involucren a los distintos niveles de la empresa.
Con la variedad de opciones disponibles en el mercado de energías renovables y las múltiples prácticas de eficiencia energética, ningún área de una empresa debería quedar al margen de esta transformación.
Es hora de que las gerencias comprendan que el enfoque en proyectos innovadores va de la mano con la inversión en un cambio cultural sostenible, un cambio que no solo beneficia al ambiente, sino también a la viabilidad económica de las empresas chilenas.
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