El metaverso; desafíos y oportunidades
El pasado martes 24 de octubre, se llevó a cabo la segunda sesión de la Mesa de Desafío Digital Chile, una instancia de reflexión en torno a cómo enfrentar -desde el mundo productivo y académico- la necesidad de actualizar y capacitar al capital humano nacional para que sea capaz de aprovechar la inmensa oportunidad que la nueva realidad digital nos entrega a nivel mundial.
En esta oportunidad, hablamos del Metaverso, un tema que, si bien es complejo e incluso controversial, debemos conocer y comprender para desarrollar herramientas, identificar brechas y oportunidades que nos permitan evolucionar -o al menos intentarlo- al ritmo de las nuevas tecnologías.
Miguel Musa, Master en Ciencias en Gestión de Ingeniería, Diseño y Gestión de Sistemas del MIT y experto en Fintech, expuso acerca de su funcionamiento, origen y estado actual, además de sus implicancias económicas, sociales y culturales.
Muchas empresas alrededor del mundo invierten actualmente en el Metaverso; un mundo virtual que ofrece experiencias inmersivas y de realidad aumentada de la cual -según proyecciones de expertos- la gran mayoría seremos parte en un futuro cercano. Estamos viviendo una nueva revolución tecnológica, y es fundamental que seamos capaces de conocer y comprender de qué se trata, cómo puede beneficiar a nuestros negocios, cuáles son sus brechas y cuál es su estado actual de desarrollo. ¿Sabías que hay más de 3 billones de jugadores en plataformas de juego en el metaverso?, ¿y que el mercado es de 600 billones de dólares, en valorización de activos?. Son cifras impactantes que se presentan como un desafío, considerando que estos números representan a gran parte de la fuerza laboral del futuro; desde los millennials hacia abajo.
Abordando los desafíos del metaverso.
Musa, a partir de sus investigaciones y experiencia, propone que hay 4 cosas que debemos hacer para enfrentar estos cambios:
- Entender el valor del metaverso: Al igual que todos los cambios drásticos, el metaverso es difícil de aceptar e incorporar en nuestro día a día. Por eso, propone que debemos comprender cuál es su valor real y las oportunidades que ofrece, siempre considerando sus riesgos y limitaciones.
- Entender las tecnologías: Involucrarse con tecnologías que son parte del desarrollo.
- Estudiar casos de éxito: Investigar y aprender de los casos de éxito. Es ahí donde podemos encontrar similitudes con nuestro negocio y aprender de la experiencia de otros. Plantea que, en general, los NFT exitosos no son solo el producto, sino el acceso a algo, como ser parte de una comunidad, ganar estatus, etc.
- I+D: Invertir en investigación y desarrollo. Analizar oportunidades de mejora en nuestro negocio a partir de esta nueva tecnología.
A partir de esta presentación, se generó entre los asistentes una interesante conversación en torno los desafíos que suponen estas nuevas y disruptivas tecnologías, y cómo deberíamos enfrentarlos. Una de las principales conclusiones, se refieren a cómo el metaverso y su funcionamiento puede incrementar las brechas culturales ya existentes, particularmente en lo corporativo y lo social. Por otro lado, se destacó la gran oportunidad que ofrece, al eliminar las restricciones de tiempo y espacio, para generar nuevas instancias, nuevos escenarios, alianzas estratégicas y mayor agilidad en el desarrollo de proyectos.
Análisis desde lo corporativo y lo social
Desde el mundo corporativo; la capacitación institucional, la formación de líderes, la alfabetización digital y los marcos legales son factores relevantes que debemos analizar a nivel país al momento de integrar el metaverso dentro del sistema de trabajo. Cuáles son los límites y barreras, la segregación etaria que puede generar -considerando que el público actual del metaverso se compone principalmente de personas menores de 40 años- y la volatilidad en materia económica, ya que actualmente el valor de la moneda de cambio del metaverso se basa en la confianza de las personas. Desde lo social, es muy importante considerar cómo las brechas actuales de acceso a internet, educación, apoyo familiar e incluso salud mental pueden incrementarse por este fenómeno. ¿Qué pasa con el individualismo? ¿Se generarán nuevas comunidades virtuales que fomentarán el trabajo colectivo?. Y por otro lado, ¿cómo replantear los espacios presenciales, públicos y de trabajo? El metaverso abre un nuevo espacio, nos empuja a encontrar formas de potenciar y darle valor a la presencialidad en un mundo en que lo virtual toma cada vez más terreno en la vida y experiencia de las personas. En conclusión, es fundamental hacernos cargo, investigar, analizar oportunidades. El metaverso ya no es “el futuro”; es el presente y debemos tomar acción, comprender, proyectar y aplicar, para mantenernos vigentes, evolucionar en sintonía con las exigencias del mercado, adaptarnos e incluso adelantarnos a lo que el metaverso nos ofrece, para poner la tecnología al servicio del mundo corporativo, académico y la sociedad en general.
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